Capítulo 7
Los padres de Flora al verse atrapados en la red silbaron fuertemente para que un águila gigante que cuidaba su castillo los escuchara. El águila, que se llamaba Federico, escuchó los silbidos desesperados de los reyes y rápidamente voló hacia el lugar de dónde estos venían. Al llegar allí, el águila se enfrentó con la bruja y el monstruo y, con mucho esfuerzo y un poco de suerte también, consiguió agarrar a los reyes con sus garras y llevarlos a un sitio seguro.
Después de un buen rato, y con el susto en el cuerpo, decidieron que tenían que seguir con la búsqueda de su hijita Flora, pero esta vez en compañía de Federico, el águila.
Federico llamó a varias aves amigas suyas y empezaron la búsqueda desde el cielo, pero el bosque era muy frondoso y las copas de los árboles apenas dejaban ver nada bajo ellas.
Mientras tanto, en otro lugar del bosque, aún temblorosas por la experiencia vivida, Flora y Valeria estaban buscando la forma de encontrar a los padres de Flora. Así que Valeria dijo:
- ¿Por qué no pedimos ayuda a los animales del bosque?
Se pusieron manos a la obra y pronto empezaron a llegar animales de todas las especies. Pero de entre todos hubo uno que, por sus características, sorprendió a Flora. Era el elefante Rodrigo (verde y con lunares azules).
- ¡Hola! – le dijo tímidamente Flora.
- ¡Hola! – respondió amablemente Rodrigo.
Así fue cómo comenzaron a hablar y, después de un buen rato, Rodrigo le comentó a Flora que él era un príncipe al que la malvada bruja había convertido en elefante.
Flora le dijo a Rodrigo que si él colaboraba con ella en la búsqueda de sus padres, le volvería a convertir en un príncipe, ya que ella era una princesa con poderes que por ciertas circunstancias se había convertido en una elefante.
Rodrigo se puso muy contento ante esta propuesta de Flora y dijo:
- ¡Comencemos la búsqueda!
Y así fue cómo en ese mismo instante Flora, Valeria, Rodrigo y algunos amigos más se pusieron en marcha.
Por otro lado del bosque los reyes, al no haber obtenido resultados con la búsqueda llevada a cabo por Federico, el águila, y sus amigos, decidieron comenzar la búsqueda a pie sin saber qué otros peligros podrían estarles acechando en el bosque, ya que ellos aún no se habían olvidado de la malvada bruja y de las trampas que ésta pudiera estar preparando.
¿Se encontrarán Flora y sus padres?